Es probable que al pensar en una bailarina de ballet, recordemos a una chica que lleva un moño muy bien recogido, sin ningún cabello salido ni estorbando. Pero, ¿por qué es así? En este blog responderemos a estas preguntas y te enseñaremos a hacerlo perfectamente para tu próxima clase de ballet
El moño permite que toda la atención esté dirigida al movimiento y no a recogerte el cabello una y otra vez, a quitártelo del rostro, e incomodarte con la picazón que genera al contacto con la piel. Porque, si bien son cosas sin importancia, pueden entrar en la memoria muscular y generar movimientos inconscientes, que prevalecen incluso estando bien peinada
Es práctico para girar y saltar. Estos dos movimientos involucran velocidad y fuerza, por tanto, si el cabello no está bien sujeto en su sitio, puede ser una incomodidad para las bailarinas y, en el Pas de Deux (baile en pareja) para el compañero. También puede entorpecer el movimiento porque si se hacen giros con una cola de caballo, es muy necesario cerrar los ojos para evitar que el cabello los moleste, y bueno, ¿quién puede girar con los ojos cerrados si es necesario fijar un punto?
Mejora el equilibrio. Adicional al punto mencionado con anterioridad, el cabello recogido le resta peso a la cabeza, lo que hace más fácil mantener el eje. También por esta razón, el moño se suele usar en el centro de la cabeza.
Ayuda al maestro a corregir errores técnicos. Si todos están uniformemente arreglados, podrá ser más fácil para el maestro notar los errores en la postura y en movimientos.
Ahora bien, ¿cómo hacerlo correctamente? Aquí te dejamos un video paso a paso que te ayudará a estar lista para tu siguiente clase
Video tomado de Bloch Australia (30 de Enero de 20218)
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